Final Fantasy X es uno de esos juegos que debes jugar al menos una vez en la vida. Da igual si has jugado a algun JRPG o no, es un juego, que aun con sus fallos, es espectacular.
La historia sin ser la mejor de la saga es muy muy buena y te mantendra enganchado, y tiene unos personajes fantasticos (mencion especial a Tidus y Auron )
La jugabilidad es sin duda lo mejor del juego, con unos combates por turnos muy bien elaborados y sin duda algunos combates contra jefes pueden suponer un gran reto.
El tablero de esferas es la nueva mecanica que se introduce en la saga para desarrollar a nuestros personajes, es muy muy completo, y tenemos cientos de posibilidades. Por ejemplo, Auron, que es un personaje con muchisima fuerza fisica, pero con poca rapidez y cero poder magico, podemos hacer que se convierta en mago negro y empiece a lanzar hechizos. Como digo hay muchas posibilidades para desarrollar a los personajes.
La banda sonora es otra maravilla, me gustaron casi todas las canciones del juego. Algunas hasta son muy emotivas y pueden hacerte soltar una lagrimilla, sobre todo en algunas escenas.
Los graficos son espectaculares, o al menos lo fueron en su epoca. Yo cuando lo jugue me sorprendio mucho.
La duracion esta aceptable, 40-50 horas solo para la historia principal y 100-120 horas para completar el juego al 100%, con todos sus jefes secretos y armas legendarias.
Un punto muy negativo que le encuentro a este Final Fantasy X, es que es muy lineal hasta un cierto punto del juego, (casi el final), y eso puede no gustar mucho
Pros:
+Gran historia y personajes
+Jugabilidad sublime
+Gran banda sonora y muy buenos graficos
+Una cantidad descomunal de contenido secundario endgame (multitud de bosses secretos, armas legendarias, coleccionables...)
+Minijuegos como el blitzbol o las carreras de chocobos
Contras:
-Muy lineal durante casi todo el juego
En conclusion: Es un juego que debe ser jugado por todo el mundo al menos una vez en la vida, seas fan del genero o no2 VOTOSManster2000-20179Hace 6 años49
Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9,5
La última fantasía de SQUARESOFT
Final fantasy x, es un juego qué no esperaba qué me encantará tanto, yo ya me había imaginado que me gustaría, !Pero no que lo amara!, La historia es lo mejor qué tiene el juego, me atrevo a decir que tiene la mejor historia de la franquicia final fantasy. Si lo eh dicho , la historia habla de cosas como la religión,la discriminacion, el racismo, el sacrificio, la amistad, y por supuesto, el amor. Los personajes son muy carismáticos,y tienen un desarrollo tan bueno que los acabas adorando ( la mayoría de ellos). Empecemos con Tidus, yo creía que iba a ser molesto y odioso durante todo él juego, y resultó ser una gran sorpresa, el personaje tiene una historia muy interesante,y un desarrollo tan bueno que no pude no encariñarme con el, y su relación con Yuna, (que ya hablaré más tarde),es muy buena . Y hablando de ella, Yuna es, junto con Tidus, la protagonista de la historia, ella tiene una personalidad muy agradable , su historia es interesante,y las escenas de conversación que tienen con Tidus,son muy tiernas y aveces divertidas, ella y Tidus SON los protagonistas de la historia, si.Final fantasy x no tiene un protagonista, tiene dos. Y la forma en cómo te cuentan la historia de estos dos, es genial.Ahora hablaré de los otros personajes principales. Wakka es un personaje qué al principio no me gustaba, su diseño, su molesta devoción a su religión, y su odio hacia los Al-bhed lo hacía para mí un personaje molesto, pero eso era antes, ya que con el tiempo. Wakka evoluciona, y su devoción hacia la religión de Yevon desaparece a medida que descubre lo podrida que está, y eso hace a wakka un buen personaje para mi, por su evolución, su desarrollo. Ahora hablemos de Rikku, ella es probablemente el personaje que mejor me cae, porque, su alegría, sus divertidos momentos la hacían un personaje adorable, y lo mejor de todo, es que ella, tiene una forma de ver las cosas, de forma más realistas y calmadas, lo que demuestra que ella no es tan inmadura como se creía. Y ahora hablemos de Lulu, sinceramente no puedo decir mucho de ella porque su personalidad es siempre muy fría, por lo cual la considero un personaje decente, mejor no habló de Kimarhi, porque él no es mejor...Pero el mejor,es sin lugar a dudas, Auron, un personaje simplemente genial, tiene estilo, dice frases geniales ,y tiene una muy interesante y buena historia,personalmente es mi personaje favorito del juego. Bueno ya hablado de los personajes principales, ahora hablaré de las mecánicas, el juego es como en los anteriores Final fantasy, un rpg de turnos, lo cual,hace aquello el combate sea estratégico, este juego tiene, en mi opinión, la más divertida mecánica de combate de la franquicia,es muy divertido,el hecho de cambiar de personajes durante la batalla,y es muy fácil de aprender los controles, la banda sonora,compuesta por Nobuo Uematsu es maravillosa como siempre, teniendo temas muy buenos, temas alegres, emocionantes,y temas tristes, y la hermosa canción de ``suteki da ne’’ es simplemente una hermosa canción. Los gráficos para se de un juego de la ps2 son geniales, están bien pulidos y bien detallados, y las actuaciones dé voz, son buenas, no geniales, pero sí que mas que decente.Y como eh dicho la historia es genial,y lo que mas adore de la historia, es de la relación de Tidus y Yuna, ellos son mi pareja favorita de cualquier otro final fantasy, ellos tienen una excelente química entre ellos,y no se siente ni cursi, ni forzado. Las escena entre ellos son geniales, y bien escritas, sientes que poco a poco la relación entre ellos es más que una amistad, es amor, y no amor cursi y barato como en ‘‘Crepúsculo “ si no una muy sincera y bien escrita, pero...El final te deja con el corazón roto, los que han jugado el juego, y lo han terminado lo entenderán, ese final te destroza al ver qué ellos no tendrán un final feliz,y eso te deja triste. Buen en conclusión, Final fantasy x me parece un juego excelente, bien escrito, bien diseñado, con personajes carismáticos y un final triste pero genial, es para mi el último Gran final fantasy.Juanmiguelo253Hace 5 años50
Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
10
Los sueños desvanecidos.
Existen una serie de juegos que te marcan de por vida una vez que los juegas. Juegos que tienen algo diferente, algo que, por mucho que lo intentas, ningún otro es capaz de ofrecerte. Que recuerdas con cariño, y a los cuales juegas más que a ningún otro, los que antepones incluso a novedades, aunque los hayas jugado ya hasta la saciedad. Los disfrutas, son más que la mera interacción de la consola y el jugador. Pocos, muy pocos juegos son capaces que decir algo así.
Todos podemos decir que tenemos el juego o juegos de nuestras vidas. En mi caso es la saga Final Fantasy y esta décima entrega es sin duda una de mis favoritas. No recuerdo haberme visto jugando a un videojuego con la pasión con la que disfruté (y disfruto aún hoy) este. Para muchos es el juego que marcaría el final de Squaresoft y el paso a Square Enix, algo diferente que parece haber matado a la saga Final Fantasy. Creo que Square no está tan mal, pero tampoco es aquella que me brindó las mejores experiencias videojugabilísticas de mi vida.
Antes de leer esta análisis, seguramente miréis la nota, probablemente esté destripando lo que más parece importar de un análisis, que es la nota. Sí, Final Fantasy X va a recibir un 10 en este análisis. Pero, ¿Qué entendemos por un 10? No es un juego perfecto. Ninguno lo es. Final Fantasy X no es un juego perfecto. Es uno de los juegos de mi vida, pero soy consciente de sus fallos, de los cuales hablaré en el texto que viene a continuación. En mi opinión, el 10 debe servir para distinguir los meros juegos grandes de aquellos que realmente están destinados a ser eternos, a ser insuperables, a marcar la pauta, a ser los juegos favoritos de alguien. No concibo otra nota para él, implicando este significado, y de hecho, el propio análisis permitirá ver como la importancia de las notas es subjetiva. No quiero que este análisis se recuerde por su nota. Entremos, sin más dilación, en el mundo de Spira…
La trama de Final Fantasy X se va desgranando poco a poco, presentándonos las particularidades del universo que ha construido Squaresoft para esta entrega. Descubriremos a los albhed, un pueblo que emplea las máquinas, prohibidas por el dogma de Yevon, la religión predominante en el mundo. Por ello, son rechazados por el resto de la sociedad, temerosa de todo por culpa de Sinh. El juego presente aquí temas interesantes como el rechazo social o el poder eclesiástico, de una forma bastante elegante.
También es bastante interesante la evolución que van sufriendo los personajes conforme avanza la trama, especialmente notoria en Tidus, que empieza siendo un personaje ciertamente airado, y que no comprende prácticamente nada de lo que le rodea, lo cual con su "amnesia" el mundo de Spira nos ira contando poco a poco su funcionamiento, reglas y rutinas de una manera orgánica. Con el avance de la trama, se convertirá en un personaje más maduro, a la vez que se verá cada vez más cercano a Yuna.
Otros personajes del grupo, como Wakka, también tienen su fase de evolución, pero la base del trama es el peregrinaje de Yuna, así como presentarnos todo el universo que nos rodea de la mejor manera posible. Y es que el mundo de Spira es muy variado y rico en localizaciones, que influirán directamente en los personajes. Destacan sitios como Miihen, la llanura de la calma, Bevelle, Luca, el rio de la Luna, el bosque de Macalania... claves en los eventos de la trama. El juego tiene igualmente algunos momentos dignos del recuerdo, algunos bastante tristes y otros que te sacaran mas de una sonrisa.
Seremos testigos de el destino de los muertos o del fracaso del combate contra Sinh, así como las consecuencias del rechazo que sufren los albhed (los cuales, conforme los conocemos, veremos que no son los malos). El credo de Yevon también será parte central de la trama, pasando de pilar idealizado de la sociedad, a un autócrata que se aprovecha de su posición.
En cuanto a los villanos, digamos que el juego realmente reserva más de una sorpresa. El personaje de Seymour tiene un papel bastante relevante en la trama, ya que primero se nos presenta como un aliado poderoso, como alguien importante, para dar paso a un tirano déspota que nos dará más de un quebradero que cabeza. Parece evidente que Sinh es el gran objetivo, y la situación parece clara, que nos llevará a matarlo y llevar a la Calma. Sin embargo, en el transcurso del juego habrá algunos giros de guion realmente brillantes, generalmente relacionados con la pareja protagonista de Tidus y Yuna, que nos llevarán a un final que se puede catalogar como valiente, diferente a lo visto. También hay espacio para momentos realmente emotivos en la trama, protagonizados por distintos personajes. Incluso situaciones de superación personal, como es el caso de Kimahri. Hay muy poco que reprochar a la variedad de esta historia.
El juego nos presenta una jugabilidad bastante característica, y a la vez tradicional dentro de la saga, mezclando el sistema de juego de los primeros Final Fantasy, de turnos estáticos, con sus propios aportes que sentarían cátedra. Su desarrollo de juego, como muchos pueden haber observado, es lineal, basándose en ir superando una serie de mapas. No muy diferente a lo que es FF XIII, ¿No? No obstante, el pasillo de FFX tiene mucha más vida, mucha más variedad, siempre ofreciendo cosas nuevas al jugador, haciendo que se note bastante menos este hecho. Llegado un determinado momento del juego, tendremos acceso a un barco volador que nos permitirá revisitar cualquier lugar para cumplir los múltiples objetivos secundarios que tiene el juego. (Que no son pocos y encima son de gran calidad.).
A la hora de combatir, se nos ofrece un sistema denominado de turno dinámico, y es que podemos saber quien va a atacar a continuación gracias a una barra a un lado de la pantalla. No obstante, nuestros ataques van a determinar cambios en ese orden. Por ejemplo, emplear ciertas técnicas como Prisa cambiarán el orden, acelerándonos, o Freno, haciendo que tardemos más en actuar. El uso de ataques límite también puede cambiar este orden. Dichos ataques, denominados turbo, son diferentes para cada personaje y suelen implicar un pequeño QTE para lograr resultados. Tenemos ruletas, secuencias de botones, o giro de los joysticks. Incluso un pequeño juego de alquimia que nos permitirá obtener mejores resultados combinando objetos.
Los combates, son bastante tradicionales, con tres personajes a la vez que pueden ser intercambiados en cualquier momento por los que tenemos en reserva. Cada uno, aunque no hay clases, está especializado en un tipo de ataques diferente. Esto se ve más claro con Yuna y Lulu, maga blanca y maga negra respectivamente, siendo más difícil encasillar al resto de personajes. Los enemigos tienen una serie de debilidades elementales que podemos descubrir y aprovechar, y otros, por ejemplo, solo pueden ser combatidos con garantías por ataques a distancia, al ser voladores. Otros, como los dingos, son demasiado rápidos y solo personajes veloces podrán alcanzarlos. La resistencia de determinados monstruos los hace propensos a ser atacados por personajes con armas contundentes, y así, permitiéndonos experimentar para obtener el mejor grupo posible.
Durante los combates, obtendremos experiencia que no nos otorgará niveles, sino movimientos en el tablero de esferas, así como esferas para dicho sistema. ¿Y qué es el tablero? El lugar donde nuestros personajes subirán sus estadísticas. Está situado de forma que solo hay uno para todos, pero cada uno está situado en posiciones distintas y todos pueden aprender cada esfera ahí encontrada. Tenemos dos caminos posibles, el Básico y el Avanzado. El primero no deja mucha manga ancha para experimentar, siguiendo unos personajes bastante guiados. El otro nos deja más lugar para ir experimentando con ramificaciones que pueden lograr una Yuna maga negra, o un Kimahri que puede seguir bastantes rutas a la vez. Hay que seguir una planificación mucho mayor para lograr los resultados deseados.
Pero las esferas no solo sirven para el tablero. También nos permitirán, al avanzar en el juego, mejorar nuestras armas y accesorios. Solo tenemos uno de cada por personaje, limitando mucho el equipamiento. A cada una van asociadas habilidades pasivas, como imbuir ataques con fuego, penetrar armaduras, o auto-libra, por poner unos ejemplos. Lo mismo para los accesorios. Mediante las esferas, podremos otorgarles habilidades nuevas.
Los eones son una gran novedad en la saga, y es que las invocaciones son controlables tanto como los personajes, teniendo su propio set de habilidades. También podremos hacerle mejorar, si bien ellas lo harán mediante esferas simplemente, sin tablero. Podremos darles estadísticas o habilidades nuevas que las harán más versátiles. En combate, actúan como personajes muy fuertes, con un ataque turbo devastador cuando lo realizamos. Cuando los retiramos o caen, volvemos a ver a nuestro grupo habitual.
El juego ofrece también una actividad alternativa, el blitzball, siendo así el minijuego de esta entrega. Es un deporte que puede combinar balonmano y fútbol con natación, por decirlo de alguna manera. Sus reglas son bastante extrañas, dependiendo de puntos de vit, puntos de tiro, y diversas estadísticas. Por ejemplo, al dar un pase, su éxito influye en nuestra fuerza al darlo y en los posibles rivales que se pongan frente a él. Lo mismo ocurre con los tiros, mejorables con diversas técnicas. Podremos a lo largo del juego reclutar personajes para nuestro equipo de blitzball, logrando así un conjunto de garantías para ganar los distintos torneos que ofrece la modalidad. Lo cierto es que no es un deporte del todo satisfactorio al implicar mucha estrategia y poca acción, pero su profundidad está fuera de toda duda.
El juego, a pesar de su linealidad, nos ofrece una experiencia totalmente rica, que incluso implica la aparición de puzzles en los distintos templos que visitaremos, basados en la colocación de esferas en pedestales, y tematizados por el elemento del eón (fuego, hielo, rayo…) dando pie a situaciones muy originales. No obstante, son partes un poco monótonas.
En definitiva, la inmensa variedad que posee el pasillo de FFX lo hace ser bastante disfrutable. Pocas veces me encontré en una situación de aburrimiento, y eso es algo que agradezco bastante. Realmente, no se echa de menos un mapamundi por el mero hecho de que no es necesario. Bien es cierto que hay alguna sección por encima de otra, pero el juego alcanza, con su sistema de combate, una variedad de situaciones dentro de él envidiable, incluso con pequeñas variantes interactivas. Tengo muy poco que reprochar a esta jugabilidad. De hecho, me encantaría que cuantos más juegos se parecieran a ella, mejor. No es casualidad que los últimos Final Fantasy hayan apostado por algo similar al tablero de esferas, o FF XIII tenga tantas cosas en común con X, buscando acercarse lo más posible a él.
Final Fantasy X no es solo su historia principal y es que el juego, cuando nos abre sus posibilidades, nos enseña una gran cantidad de contenido secundario. Empezamos con los eones extra, que tienen su propia historia para conseguirlos, pero merece la pena. Aquí encontramos a Yojimbo, un eón desbalanceado que, con su ataque Ultraesgrima, que puede salirte pagándole apenas 1 guil (tú le pagas, y según la cantidad puede hacer un ataque u otro) y destroza a todos, ya sean jefes o enemigos normales. Tendremos la ocasión de ir encontrando a lo largo del juego una serie de diccionarios albhed que nos permitirán conocer lo que dicen los personajes que hablan en ese idioma cuando los tengamos todos. También tendremos la ocasión de buscar una serie de esferas de Jetch, que aclaran mejor algunos hechos. En lo referente a jefes secretos, tenemos algunos bastante duros como las versiones oscuras de nuestros eones, así como alguno que otro mejor que el propio jefe final. El juego oculta también la dura búsqueda de las Armas de los Astros, cada una obtenible de una manera diferente, que nos mantendrá bastante ocupados. La Llanura de la Calma, lugar más abierto del juego, esconde también un sistema de caza de monstruos que nos abrirá las puertas de una especie de coliseo. Dando el golpe de gracia a un enemigo normal con el arma que venden ahí, lo capturaremos para dicho coliseo. En él, podremos pagar una cantidad para enfrentarnos a ese monstruo en concreto. Obtenerlos todos, de todas las áreas es un excelente reto.
Teniendo en cuenta la época en la que salió, Final Fantasy X poseía un motor gráfico bastante competente, siendo pionero en el uso de imágenes CG realistas, lo que se convertiría en una seña de identidad de la saga. Los momentos más espectaculares tenían su secuencia por ordenador que les añadía mucho más y lograba causar impresión en el jugador. En cuanto al motor en sí, poseía varios tipos de calidad de modelado, mostrando los de mayor factura en las escenas de vídeo. La expresión facial tenía su calidad para la época, y por norma general en animaciones no iba nada mal. En cuanto al diseño artístico, destaca la variedad de entornos que encontramos. Especialmente sobresalientes las ciudades Luca y Bevelle, o el diseño de los eones, muy actualizado y diferente.
Es evidente que Square Enix mejoraría estos resultados con Final Fantasy XII, pero FFX es uno de los juegos más potentes de la época en PS2. Sin tirones aparentes, y con un diseño de menús bastante limpio y cuidado, que rompía con el azul característico de la saga hasta entonces y sentaría un cierto estándar en futuras entregas. Posee una ambientación que combina la tecnología y lo rural bastante recurrente en la saga.
Como puntos flacos destacaría el diseño de enemigos, que se podía volver a veces algo repetitivo, no así el de jefes, así como la calidad de los modelados en los personajes secundarios, con un evidente estándar de calidad inferior a los protagonistas. Sin embargo, hay muy poco de achacar a FFX en términos gráficos, pues no solo cumple, sino que agrada visualmente y demuestra el poderío que manejaba la Squaresoft de la época
Varias veces escucho la banda sonora de este juego en mi tiempo libre, no es poco lo que puedo decir de esta BSO, desde que tiene el que considero mejor tema de batalla de la saga, así como una de las canciones más hermosas, como es “To Zanarkand”. .También de los primeros juegos de la saga que apuesta por temas de géneros distintos, como el metal de “Otherworld”. No obstante, la OST en general conserva una esencia muy Final Fantasy, alcanzando una calidad que ya querrían para sí muchos juegos. Es también el primer juego de la saga que está doblado al inglés y al japonés, de una forma bastante destacable y creíble en bastantes personajes.
El repertorio de efectos de sonido no es tan elevado, pero tampoco lo necesita realmente para lograr un sólido resultado sonoro. Solo por poder escuchar algunas de las piezas de las que hace gala FFX ya merece la pena disfrutarlo. Tiene las que son para mi las canciones más emotivas de la saga, y una destacada música de ambientación. De todas las horas que he disfrutado con él, me puedo quedar con Someday the Dream Will End, Besaid Island, To Zanarkand, el tema vocal de Suteki Da Ne que hace que los momentos emotivos lo sean todavia mas, el tema de Tidus, el de Yuna, el Salmo... Absolutamente todas son increíbles. Es cierto que la música de Final Fantasy X puede estar considerada como de un nivel enorme pero inferior al de sus predecesores pero yo pienso que son gustos totalmente subjetivos y que todas las bandas sonoras del gran Nobuo Uematsu insuperables.
Como dije al principio del análisis, la nota estaba ya sentenciada. Final Fantasy X tendría un 10 por todo lo que me ha dado como jugador. No obstante, eso no me impide valorarlo con cierto índice de objetividad, toda la que permite la subjetividad de un análisis. Como ya he mencionado, tiene prácticamente todo a favor, si bien podría ser un poco mejor gráficamente, y su linealidad puede jugar en contra para algunos. También le falta un poco de mayor diversión en el tema puzzles, que son la parte más pesada de todo el juego, cortando el ritmo. Square Enix no tiene que hacer mucho para recuperar la senda. Solo tiene que fijarse en su glorioso pasado y tomar mucho del mismo para reformarse. Se les ve la intención, pero ya no tienen el talento que acostumbraban o que básicamente ahora hay que agradar a la mayor parte de publico y hacer algo mas "comercial".
Lo único cierto es que todo poseedor de una Ps2 este juego tiene que estar en su catalogo si o si. Si no es el caso están las versiones remasterizadas y los emuladores, no hay excusa para enamorarte de esta fantasía final.7 VOTOSArlintongEstrada1Hace 3 años51
Jugabilidad:
Gráficos:
Sonido:
Innovación:
9
O lo amas, o lo odias, no hay término medio.
Decir que este juego no significa absolutamente nada para mí sería mentir descaradamente, a pesar de que no fue ni el primer juego de su saga que jugué ni tampoco uno que haya tenido presente durante mi infancia y que por ello lo único que tenga para hablar bien de él sea desde la nostalgia, de hecho, no lo jugué debidamente hasta mis 18 años de edad con una mentalidad más abierta, por lo que creo que estoy preparado para hacer un análisis objetivo sobre no solamente uno de mis RPG por turnos favoritos, sino también mi juego favorito en general.
Final Fantasy X es un juego que divide bastante la opinión del fandom por distintas razones, hay quienes lo defienden como un buen juego usando como principal argumento el haber formado parte de sus infancias, y hay quienes lo critican atacando a la inexistencia del mapa mundi tenido como estándar en toda la saga hasta la llegada de este juego, a sus escenarios pasilleros y a un momento puntual dentro del desarrollo del juego, existiendo quejas menos relevantes a la historia en general, a sus personajes e incluso a su sistema de combate.
Pero entonces... ¿Qué podría argumentar yo al respecto? Podría decir que muchas de esas quejas son cosas que a mi personalmente o me dan igual o directamente me gustan (que es verdad), pero no nos conformaremos con eso, destriparemos poco a poco los distintos puntos del juego.
Para empezar, Final Fantasy es una saga muy conocida por centrarse en recorrer grandes mapas mundis en sus distintos juegos, siendo su atractivo principal para los fans veteranos o simplemente algo a lo que se llegaron a acostumbrar y a normalizarlo como el estándar para la saga. Podría argumentar que es simplemente el "purismo" de los fans que quieren que todo se mantenga exactamente igual luego de 9 largas entregas principales, sin embargo debemos tener en cuenta ciertas cosas, y entonces, ¿Final Fantasy X es un juego lineal y sin exploración? Pues... es una verdad a medias.
Al igual que muchas otras sagas como The Legend of Zelda que apuntaron a una nueva dirección con Ocarina of Time y más tarde con Breath of the Wild, era predecible que con el salto a la nueva generación Squaresoft no iba a conformarse con simplemente repetir todo lo que llevaban haciendo hasta ese momento, y que buscaran hacer un juego más digerible y accesible para los nuevos jugadores, cosa que naturalmente desagradaría a los fans de toda la vida, y es comprensible, y lo cierto es que si lo miramos con perspectivas tuvieron aciertos y fallos. De plano, el mayor pecado de este juego es ser pasillero, que no, no es lo mismo que ser lineal, ya que puedes ser un juego lineal y al mismo tiempo poseer exploración y un buen diseño de escenarios, cosa que lamentablemente FFX no tiene por más que me pese decirlo, los escenarios son literalmente largas rutas en las que haces lo de siempre, pelear contra monstruos y abrir cofres, aunque de una forma más simplificada con respecto a anteriores juegos; esto sí me parece un fallo, y creo que al juego le hubiera venido bien tener más exploración dentro de su linealidad, y que sus escenarios no fueran literalmente rutas rectas por las que pasas sin casi ninguna desviación. Entonces, ¿Por qué es una verdad a medias? Pues porque se da la casualidad de que el juego trae un montón de contenido secundario tan pronto como consigas el barco volador, el cual se obtiene casi al final del juego... si, eso es algo que no a muchos les gustó, y les gustó mucho menos que ahora tuvieras un selector de áreas en lugar de ir por tu cuenta sobrevolando el mapa, pero el caso es que una vez que llegas a este punto puedes pasarte prácticamente el mismo tiempo (o incluso más) que te tomó llegar hasta ese punto haciendo misiones secundarias y mejorando a los personajes, algo que en efecto hace que se sienta más como un FF de toda la vida, aunque para muchos probablemente llegó demasiado tarde en la aventura.
Pasemos ahora con algo que personalmente me cabrea algo mas pero no con el juego sino con los fans, que es el momento puntual del que hablé antes, osea la escena en la que los protagonistas Tidus y Yuna, básicamente se empiezan a reír como subnormales. No quiero profundizar mucho en esto porque me siento hasta tonto al tener que decirlo, pero esta escena es un momento de inflexión para el protagonista, en el que debe reírse aunque no tenga la motivación para hacerlo porque debe seguir adelante, el culmen llega cuando justo después de que acaban se empiezan a reír normalmente y sin sonar forzado, ya que eso era básicamente lo que estaban haciendo, pero claro, la escena da cringe y por eso ya es mala y todo el doblaje de paso también es malo, por favor, hay que ver los matices en todo esto, sinceramente que vuelvan a usar la escena como si probara algo es algo que debería dar hasta pena.
Pero en fin, luego de sacarme de encima a una elección de diseño que si está mal pero no por no ser lo que los fans querían sino porque fue mal implementado de base, y a una escena malinterpretada, ahora si hablemos de las bondades que nos ofrece este juego.
He estado hablando sobre diferentes aspectos del juego como si absolutamente todos vinieramos de la misma base para entenderlo, pero igual hay que hacernos la pregunta: ¿De qué va Final Fantasy X?
Este juego nos narra una historia con tintes claramente religiosos, en la que los habitantes del mundo en el que se desarrollan los sucesos, llamado Spira, siguen ciegamente el dogma de Yevon, el cuál posee una tradición que consiste en sacrificar a invocadores que se ofrecen voluntariamente para derrotar a una terrible bestia con forma de ballena parecida al horror cósmico conocida como Sinh (cuyo nombre básicamente viene de la palabra "pecado"), la cuál tiene por costumbre regresar a la vida poco tiempo después de ser derrotada por el invocador y su Eón supremo, repitiendo así el ciclo una y otra vez. La razón por la que esto ocurre desde la perspectiva de los habitantes, es porque deben "expiar sus pecados" y una vez lo hagan Sinh desaparecerá, siendo esto una obvia mentira para darles una esperanza a la que aferrarse y no caer en desesperación.
El protagonista de la historia es Tidus, un adolescente que se termina viendo involucrado en esto, cuyas razones y verdadera identidad serán explicadas en el desenlace del juego, pero eso no es lo que nos importa en este momento. Luego de creer que ha viajado 1.000 años en el futuro, termina conociendo a distintos personajes y posteriormente a Yuna, una joven invocadora que ha empezado su peregrinaje y de la que se uniría a su causa para intentar detener a Sinh, convirtiéndose en su guardián. El objetivo será viajar al lado de Yuna y sus guardianes e intentar evitar que se sacrifique en nombre de las creencias de Yevon, y encontrar una manera para eliminar a Sinh del mundo de una vez por todas.
No vamos mentirnos, con esta premisa nos podemos dar cuenta de que la historia está lejos de ser un cliché pese a que nuestro objetivo siga siendo salvar a una chica. Quizá alguno pueda decir que está mal contada, pero yo no lo veo así, si bien la forma en la que el protagonista irrumpe en ocasiones para narrar lo que está ocurriendo y lo que pensaba en ese momento puede ser pesada, no es algo que entorpezca a la trama, e incluso te puede dar una impresión sobre el destino de dicho personaje pese a que irónicamente seguramente no terminará de la forma en la que la mayoría lo pensaba, cosa que a mi me pasó la primera vez que lo jugué y que he aprendido a apreciarlo con el tiempo, ya que en cuanto llegas al final del juego te deja con la buena sensación de haber entendido lo que sucedía, a diferencia de otro juego que lastimosamente si peca de no explicar lo suficiente como para entender lo que pasa, como fue FFVIII.
El caso es que nos puede gustar más o menos, pero es innegable que la historia de este juego es muy buena y como opinión personal, se va volviendo progresivamente mejor conforme avanza.
Ahora, los personajes principales y a quienes controlaremos durante el transcurso del juego son siete en total: la invocadora Yuna y sus guardianes Tidus, Wakka, Lulu, Kimahri, Auron y Rikku. Hablar a profundidad de cada uno me tomaría mucho tiempo, así que solo me limitaré a comentar cosas puntuales de todos ellos.
–Tidus es tenido (por desgracia) como uno de los protagonistas más molestos de la saga, y probablemente la comunidad lo consideraría el que más si Vaan del FFXII no existiera, pero me voy por las ramas, el caso es que al no ser tan serio como Cloud o Squall ni tan pícaro como Yitán, es tomado por la mayoría como un débil y un llorón, y el hecho de que no sea el más fuerte en combate en comparación a sus compañeros no ayuda mucho, sin embargo siempre mantendré mi opinión de que es uno de los personajes mejor llevados y desarrollados de la saga, mucho más humano que la media de protagonistas que desafortunadamente tiene el hándicap de ser el que menos gusta en personalidad, esto me recuerda a Shinji Ikari del anime Evangelion a decir verdad.
–Yuna es probablemente la favorita de muchos y razones no hacen falta, considero que tiene un perfecto balance casi armonioso de las características que definían a las co-protagonistas de anteriores juegos, siendo fuerte como Tifa, risueña como Rinoa e inocente como Garnet, siendo esto especialmente bueno porque la hace un personaje mucho más creíble y equilibrado, desenvolviéndose muy bien a lo largo de la trama y tomando decisiones difíciles en los momentos cruciales, no me extraña por qué es uno de los personajes más populares de la saga.
Wakka pertenece al grupo de los personajes menos queridos del juego, esto lo atribuyo principalmente a su apariencia física (su peinado vaya) y que para algunos es igual de molesto que el protagonista, sobre todo porque él es el más aferrado al dogma de Yevon que nadie más en el grupo, pero irónicamente es es precisamente gracias a esto que tiene desarrollo de personaje. Como ya mencioné, el empieza siendo alguien muy devoto y creyente, solo para que a lo largo del viaje se termine encontrando con situaciones que cambien su forma de pensar, dejando a un lado el racismo a los Albhed y su prejuicio con las máquinas, no se convierte en el más carismático del grupo pero ya tiene algo que no muchos pueden presumir de tener, que es desarrollo de personaje.
–Lulu es para mí, una de mis decepciones con la historia, ya que al inicio crea un conflicto con Wakka y sobretodo con Tidus que parece existir para desarrollarla, solo para que simplemente se vaya apagando poco hasta que tengamos que asumir que ya los quiere, sin escenas que unan personajes ni nada, simplemente tenemos que asumir que ya se llevan bien, y es una pena ya que posee una historia de fondo propia que lamentablemente no se llega a explotar lo suficiente, el personaje necesitaba más aportación en la trama más allá de ser la que se mantiene en posición neutral ante las decisiones importantes.
–Kimahri sufre de un caso similar al de Lulu pero personalmente creo que aquí está mejor llevado, ya que a lo largo del juego vemos como se va abriendo poco a poco al grupo y también vemos su conflicto con los Ronso, los cuales al final luego de una batalla lo terminan respetando luego de haberlo humillado muchas veces, el problema llega más que nada en el hecho de que esto es más una subtrama que no tiene mucho que ver con la historia central y tampoco va a hacer que Kimahri se comporte o actúe de forma distinta ante el conflicto, por eso creo que es uno de los personajes que más se mantiene como un cero a la izquierda junto a Lulu.
–Auron, al igual que Yuna, es uno de los personajes más queridos del juego, y motivos no hacen falta nada más con ver su apariencia, pero afortunadamente este hombre no se queda solo en un diseño chulo ya que tiene su trampa. A lo largo del juego vemos como la participación de Auron en el juego es muy constante, pero puede dar la sensación de que no posee un desarrollo real, y ahí es donde está la cuestión ya que resulta que Auron es un personaje que ya está desarrollado desde antes de que empiece el juego, esto lo podemos corroborar con los múltiples flashbacks en los que lo podemos ver junto a Braska y Jecht en los que se muestra más joven e inexperto, donde podemos ver todo por lo que tuvo que pasar para ser quien es hoy dia, y en mi opinión es una forma de narrar una evolución que deberíamos apreciar más a menudo, haciendo a Auron uno de los mejores personajes del juego.
–Por último tenemos a Rikku, un personaje bastante particular similar a Auron pero... peor. Para empezar ella tiene bastantes interacciones con la historia y momentos con Tidus, Yuna, Auron y Wakka, haciéndola bastante constante y sin ser un cero a la izquierda como Lulu y Kimahri, sin embargo su problema llega porque a diferencia de Auron ella no tiene casi ningún desarrollo propio, ni de fondo ni con la historia, de hecho, no irónicamente creo que ella funciona más como un soporte para el desarrollo de otros personajes, en especial el de Wakka, y a veces la vemos tener algunas reflexiones en algunos momentos, como su popular frase "Los recuerdos son bellos... pero son solo esos, recuerdos." En general no está mal llevada, pero es inferior a los personajes que si tienen desarrollo y superior a los que no terminan de tenerlo.
A continuación hablaré brevemente del sistema de combate ya que tiene su punto de interés. Como bien sabrán, Final Fantasy es una saga cuyos juegos más populares hasta antes del X utilizan el "ATB", que en resumidas cuentas significa que los enemigos podrán seguir atacando a tu grupo aunque tú no hagas nada durante un combate, un sistema que aunque se volvió querido entre sus fans, aquellos acostumbrados a los RPG por turnos les costó agarrarle el gusto (entre los que me incluyo), pues bien, Final Fantasy X se deshace de ello para volver a incorporar el sistema de combate clásico que la saga poseía en sus inicios y que es el estándar en otras franquicias de RPG, algo que desde luego gente como yo agradecimos, aunque nuevamente no fue del agrado de todo el mundo y más de uno lo tachó de ser demasiado lento, algo que curiosamente es algo que comparte con su predecesor FFIX. Para mí, el problema real del sistema utilizado en este juego en específico es que no es para nada difícil romperlo y cuando lo haces puedes conseguir que tus personajes hagan un daño desmesurado, razón por la que para contrarrestar esto decidieron añadir a los Superjefes secretos que poseen millones de puntos de vida, algo que, después de los pasillos, personalmente sería mi segunda queja con el juego ya que la mayoría de estas batallas son innecesariamente largas, y hacer a los jefes así no se vuelven necesariamente divertidos (por no mencionar que el Superjefe final del juego tiene en total 13.000.000 de vida). En ese sentido prefiero a su predecesor el FFIX, en donde el Superjefe más fuerte no era difícil por tener mucha vida sino por tener mecánicas únicas en el combate que lo hacían difícil.
Por último, me gustaría hacer una breve mención a la banda sonora y a los gráficos, la primera me parece una de las mejores composiciones que se han hecho para un juego de la franquicia, que refleja casi a la perfección el tono que el juego quiere mantener. Mi banda sonora favorita sigue siendo la del FFIX, pero no puedo simplemente ignorar lo bien logradas y adecuadas que se sienten las canciones en este juego, hago especial mención a To Zanarkand, Prelude, Otherworld, Battle Theme, Blitz Off, Seymour Battle Theme, Suteki Da Ne, A Fleeting Dream entre muchas otras que no he mencionado, sin duda uno de los aspectos menos reprochables del juego es la música. Los gráficos en mi opinión han envejecido bien a diferencia de sus hermanos de PS1, y se dejan entrar a los ojos ya juegues a la versión remaster o no (la cual también recomiendo si no tienes una PS2), en especial por las cinemáticas las cuales siguen siendo tan espectaculares a día de hoy como lo fueron en su momento.
Como conclusión final diré que da que pensar el como prescindir de la exploración para centrarse en la historia y los personajes fue suficiente como para que los fans acérrimos de la franquicia arquearan una ceja con este juego, es obvio que no es perfecto por todas las cosas que yo mismo he expuesto en este análisis, y sin embargo encuentro que es mejor en muchas cosas que los juegos pasados aunque lógicamente inferior en otras, por lo que no puedo ponerle una nota mayor o menor de la que le he dado, ya que no quiero ser el típico usuario que le pone un 10 cerrado a su juego favorito e ignora todos sus defectos.
En fin, queramos o no, Final Fantasy X se volvió uno de los juegos de la saga más populares y uno que sencillamente no deja indiferente a nadie, además de ser de los juegos que ha mantenido a la franquicia con vida gracias a sus relanzamientos a consolas de última generación y PC, junto con la mina de oro que ha supuesto FFVII para Square con su sobreexplotación, pero el legado de FFX, para bien o para mal, no será olvidado.3 VOTOS