Villanos con Triste Final en Videojuegos

Entonces, hay un villano, bastante jodido. 
La serie está por terminar, así que es hora de deshacerse de él, lenta y dolorosamente. 
Y entonces se nos va con... ¿una última frase conmovedora?

Por extraño que parezca, si quieres que los espectadores sientan pena por un villano, una buena escena de muerte es probablemente el camino a seguir. 

Y de eso se trata éste post, de algunos de esos villanos que, a pesar de lo que han hecho, sentimos lástima por ellos cuando se acercan sus momentos finales.





En Batman: Arkham City, el Joker es el indicado en éste aspecto.

Desde que éstos se conocieron, estuvo creando desastres, y haciendo todo lo posible para provocar a Batman.

Sin embargo, su muerte es sorprendentemente triste, incluso cuando sabes que se lo merecía.

A pesar de todos los atroces crímenes que cometió, Batman aún estaba empecinado en salvarlo.







En God of War (2018), nos encontramos con Baldur, el principal antagonista de ésta entrega.

Luego de que las runas profetizaran su muerte, su madre Freya, horrorizada, hizo lo posible por salvar a su hijo, otorgándole invulnerabilidad.

Sin embargo, ésta condición tenía un efecto secundario en Baldur: no podía sentir dolor, ni placer, ni saborear, ni oler, ni frío, ni calor, no sentía nada.
Esto con el tiempo lo vuelve loco, generando un gran odio hacia su madre, y busca asesinarla.

Su muerte a manos de Kratos para evitar que la matara, quien no se resistía, se trata como un asunto extremadamente solemne. 

Además de cómo devasta a la mujer, deja una gran impresión en Kratos y Atreus, con este último consternado al pensar que ser un dios siempre terminará con niños matando a sus padres, como lo hizo Kratos en la saga griega, y como lo habría hecho Baldur.

Mientras tanto, Mimir comenta solemnemente que no hubo una elección fácil con respecto a sus acciones.







A la franquicia de Assassin's Creed le encanta la moralidad gris entre Templarios y Asesinos: Ninguno de ambos bandos es completamente bueno ni completamente malo.
Ambos tienen una razón sólida y justificable para luchar.

Y por lo tanto, está llena de villanos y antagonistas de éste tipo, con momentos de ésta clase.

Tales como Sibrand, del primer juego, que enfrenta un colapso al suponer que el Fragmento del Eden es la prueba de que no existe un Dios ni tampoco otra vida, volviéndose paranoico y horrorizado ante la sola idea de morir.

O como Girolamo Savonarola, del segundo juego, quien al ser un extremista bien intencionado que usa el Fruto del Eden para purgar de todo lo que él cree que es maldad, hasta Ezio se apiada de él.

Sin embargo, si debo escoger uno en particular, sería de Assassin's Creed III: Haytham Kenway, padre de Ratonhnhaké:ton (mejor conocido como Connor).

Tras haber pasado tanto tiempo intentando en vano convertir a Connor al bando Templario, finalmente éstos tienen un duelo a muerte.
Es entonces donde finalmente Haytham reconoce, a su manera, estar orgulloso de su hijo por las admirables cualidades que ha demostrado.

Connor no se siente satisfecho con su muerte, y es bastante triste verlo llegar a su funeral, donde los dolientes de su padre están llorando, y Charles Lee está pronunciando un apasionado elogio del gran hombre que fue.







Sif, el Gran Lobo Gris, de Dark Souls es el elegido para ésta lista, es más, ni siquiera se lo puede llamar villano.

Sif es el compañero del gran caballero Artorias, y emprendieron una misión juntos para salvar al reino de las fuerzas del Abismo.
Sin embargo, fueron rebasados por la obscuridad, y Artorias defendió a su amigo erigiendo una barrera para protegerlo de la corrupción.

Luego de su muerte, el lobo se vuelve guardián de su tumba, para estar siempre junto a su amo.

Lamentablemente necesitamos uno de los ítems de éste honorable guerrero para proseguir con nuestra misión, y Sif, instintivamente ataca a cualquiera que se acerque, por lo que no tenemos más opción que acabarlo, y es más triste aún verlo cojear cuando está en sus últimos momentos.

Esto se vuelve peor si jugamos antes el DLC: Artorias of the Abyss, donde al viajar en el tiempo al momento donde la obscuridad comenzó a consumirlo todo, nos convertimos en su amigo al protegerlo y luchar a su lado.

Y al volver al presente y acercarnos a la tumba, Sif nos reconocerá, pero a pesar de no querer eliminarnos, éste aún permanece fiel a su amo, y desea detenernos para evitar sufrir el mismo destino.







Y para finalizar, BioShock nos trae a Andrew Ryan, quien se presenta como el antagonista principal durante la mayor parte del juego, pero sus momentos finales son tan espectaculares que es difícil explicarlo con palabras.

Tras encontrarse con Jack, el protagonista, éste comienza a dar un discurso y eventualmente da órdenes, seguido de la frase "Quieres?" (En inglés "Would You Kindly?", que traducido significa "Serías tan amable?").

Dicha frase es la que Atlas, amigo del protagonista, ha estado usando con él durante todo su viaje.
Y lo que podría haber sido una frase entrañable, un tic verbal bastante agradable, resulta ser el detonante de Jack, siendo éste controlado por Atlas, quien en realidad es Fontaine, y arrastrado de un lado a otro sin darse cuenta.

Obviamente, Ryan está disgustado por esto, ya que contradice todo lo que representa su filosofía objetivista, resumida claramente en su dicho favorito: "El hombre elige. El esclavo obedece."

En este punto, le "pide" que lo mate, sabiendo que Jack es su propio hijo, arrebatado desde su nacimiento por su peor enemigo y convertido en un asesino.
Es entonces donde éste se sacrifica para demostrarle que está siendo manipulado, revelándole quién es su verdadero enemigo, mientras éste lo golpea hasta la muerte.





Eso es todo por hoy.

Salu2 y que tengan un muy buen día 
EDITADO EL 07-12-2024 / 17:43 (EDITADO 4 VECES)