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El beso sin consentimiento de Luis Rubiales a Jenni Hermoso tras el triunfo de la selección española en la Copa Mundial Femenina de Fútbol ha desatado todo un movimiento social en el que se están revaluando comportamientos machistas, así como la noción del consentimiento y el abuso de poder. En este clima, que continúa los preceptos del #MeToo con un nuevo lema en España, #SeAcabó, son muchas las figuras públicas que se han pronunciado, en unos casos a favor, en otros en contra. El último en unirse al debate ha sido José Coronado, quien ha desatado la polémica con sus nuevas declaraciones sobre el tema en una entrevista con El Español, donde el actor, que siempre ha tenido fama de conquistador, se lamenta de que lo que está ocurriendo en la sociedad actual se lo pone más difícil para ser educado con las mujeres y piropearlas, una situación que le da "miedo y pena". Coronado considera que la línea se ha difuminado y le preocupa no poder ser cortés con una mujer o halagarla sin que haya consecuencias. Él argumenta tener una "buena educación gracias a los principios instalados por mi familia y por mi entorno", pero opina que, ahora, eso puede ser percibido como machismo: "Quiero poder dejar pasar a una mujer delante de mí, quiero cederle el paso sin que nadie me llame agresor, ¡o que digan de mí lo que quieran!, machista", dice en la entrevista.1 VOTOEl popular intérprete, actualmente en nuestra cartelera junto a Marta Nieto en 'Verano en rojo', continúa reivindicando su derecho a piropear a una mujer sin que se tache de acoso y asegura que sus hijos, al igual que él, tienen miedo de lo que está pasando: "Quiero poder decirle a una mujer que hoy está guapa. Todo depende de cómo se diga. Todo es el contexto. Pero sí... esto me da miedo y me da mucha pena. Yo lo hablo con mis hijos, sobre todo con mi hija, que tiene 20 años. Y ahora van con miedo a todo".Como era de esperar, sus opiniones han desatado una ola de reacciones en redes sociales, especialmente en Twitter/X, donde el actor se ha hecho viral con sus palabras. Mientras los hay que lo defienden y encumbran como nuevo adalid anti-woke, otros lo llaman "señoro" o "cuñado" y cuestionan su postura, señalando que el actor está confundiendo conceptos. El debate está servido.Ni Rubiales, ni Montero En la misma entrevista, El Español le pide que se posicione a favor de Luis Rubiales o la ministra de Igualdad Irene Montero, y Coronado reconoce que no está cerca de "ninguno de los dos", matizando lo siguiente: "Ni Montero, ni Rubiales. Como te decía antes, soy un rebelde, y soy un rebelde contra los Rubiales y las Irenes Montero, quiero seguir teniendo mi propia opinión y no voy a permitir que nadie me haga comulgar con ruedas de molino".